Santo Domingo.- Un tribunal dominicano condenó a 20 años de prisión a un supuesto pastor haitiano que en 2018 abusó sexualmente y dejó embarazada a una menor de 12 años de su misma nacionalidad en Santo Domingo, República Dominicana, Este, informó este jueves la Procuraduría General de la República (PGR).
De acuerdo con un comunicado de la PGR, el imputado es Jean Benoit Fils Leger, también conocido como Jean Ben, de 70 años de edad, y que desempeñaba funciones de pastor en una iglesia, según un comunicado de la PGR.
Haciendo uso de su influencia como líder espiritual, Fils Leger le solicitaba a la madre de la niña que la enviara a su vivienda para ayudar en los quehaceres domésticos, momento que aprovechaba para agredir sexualmente a la menor, convenciéndola que de lo contrario iría al infierno.
El 3 de noviembre de 2018, la madre de la víctima presentó la denuncia y se iniciaron las investigaciones correspondiente a través de la Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales.
En el transcurso de la pesquisa, a la niña les fueron realizadas pruebas médico-legales y psicológicas, a través de las cuales se determinó que tenía un embarazo de 19 semanas, el cual llevó a término, dando a luz posteriormente.
En su testimonio, la menor narró que el pastor le decía que si no sostenía relaciones sexuales con él iría al infierno y que “era algo normal en todas las niñas”.
El reo fue hallado culpable de violar el Código Penal Dominicano, así como el Código para la Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes.
Además de los 20 años de prisión, que deberá cumplir en la Penitenciaría Nacional de La Victoria en Santo Domingo, el Primer Tribunal Colegiado de Santo Domingo Este también impuso al acusado el pago de una multa de 200 mil pesos (unos tres mil 787 dólares) al Estado dominicano.
Esta es la segunda condena en menos de una semana en los tribunales dominicanos por casos de pederastia perpetrados por religiosos.
El pasado lunes otro tribunal condenó a diez años de prisión al sacerdote dominicano Miguel Florenzán Ulloa por haber cometido repetidas agresiones sexuales contra un menor, pero le exculpa del delito de violación por no haberse demostrado los hechos.