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Murió cuatro meses atrás, aún así dio a luz a gemelos

Una mujer embarazada con muerte encefálica se mantuvo conectada a soporte vital durante 123 días, el mayor tiempo en la historia

Perdió su vida, pero dejó dos atrás

Zampoli Padilha, brasileña de 21 años, murió mientras estaba embarazada en octubre del año pasado tras sufrir un accidente cerebrovascular.

Los médicos entonces decidieron salvar los embriones de nueve semanas de edad después de que sus corazones siguieran latiendo dentro del útero de su madres.

Padilha murió a las nueve semanas de su embarazo en octubre del año pasado después de sufrir una hemorragia cerebral.

El padre de los gemelos, Muriel Padilha, de 24 años, ha descrito su nacimiento como un “milagro” después de que los médicos le dijeran inicialmente que no había esperanza de que sobrevivieran.

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El doctor Dalton Rivabem, jefe de la unidad de cuidados intensivos neurológicos del hospital, dijo: “Hicimos una ecografía en los embriones pensando que estarían muriendo en el útero, pero para nuestra sorpresa estaban aferrados a vivir.

“Los órganos de Frankielen estaban intactos y funcionaban como si todavía estuviera con nosotros. Tomamos la decisión de mantenerla viva para salvar a sus hijos no nacidos. Y todos los días los veíamos crecer normalmente”.

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El doctor Rivabem solicitó la ayuda de un médico en Portugal que había manejado un caso similar en el que un feto gestó durante 107 días antes de nacer. Él dijo: ‘Ha habido otros casos, pero el nuestro es el más largo con 123 días, que son cuatro meses, y empezamos con dos embriones de dos meses y tuvimos gemelos.

“Una de nuestras principales preocupaciones era mantener las funciones orgánicas funcionando para que los bebés crecieran y se desarrollaran”.

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Ana Vitoria nació pesando 1,4 kg mientras que su hermano Asaph nació con 1,3 kg de peso. Su salud era comparable a la de bebés prematuros de la misma edad.

Los recién nacidos fueron mantenidos en incubadoras durante tres meses y ahora son cuidados por la madre de Frankielen, Angela Silva, mientras el padre trabaja.

Decenas de personas de todo el país, afectadas por la difícil situación de la familia, recaudaron miles de dólares en apoyo, y muchos donaron ropa para los bebés y pañales. El señor Padilha, quien es agricultor, usará parte de los fondos para renovar su casa.

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Escrito por Kaze

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