Kaze
Ramos Arizpe.- Un descuido habría costado la vida de un niño de dos años, luego de que –según la versión de su padre– consumiera por “error” una galleta con raticida. La Fiscalía General del Estado (FGE) ya investiga el hecho.
Tras informarse su muerte, elementos de la FGE procedieron con el levantamiento del cadáver del pequeño Manuel Alejandro “N”, en la casa donde residía en el Ejido Cañada Ancha, cerca de la carretera que conduce a Monclova.
Su padre, Jaime Alejandro “N”, de 24 años, relató su versión a las autoridades. Según dijo, encontró al niño en mal estado, sin poder hablar, y a un costado, en el piso, un trozo del postre con veneno para eliminar roedores, el cual lo habría matado.
De inmediato, apuntó, pidió auxilio a su hermano, Hilario “N”, para trasladar al menor en su vehículo a la Clínica 33 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Ixtlero, en Ramos Arizpe. No obstante, durante el trayecto observaron que ya no respiraba.
Ya en el nosocomio, tras valorar al pequeño, el personal médico confirmó que éste llegó sin signos vitales, por lo que se procedió al aseguramiento de los padres.
Para aclarar el caso, personal de Servicios Periciales acudirán hoy al domicilio para corroborar la declaración de Jaime Alejandro.
POR JUAN FRANCISCO VALDÉS
