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Durango, Durango.- El pasado viernes por la noche, Francisco Lucero Ortiz, de 79 años de edad, iba llegando a su domicilio cuando se percató de que unos sujetos al parecer estaban robando en su hogar.
Al ingresar, el hombre septuagenario fue asesinado de un machetazo.
Lo interesante del horrible suceso se descubriría un día después, cuando agentes investigadores de la Policía Investigadora descubrió que, entre los asesinos, estaba incluida su hija.
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Fue alrededor de las 8:00 de la mañana del sábado cuando una vecina de la calle Tres Culturas, en el fraccionamiento Huizache I, al caminar a un costado de un vehículo Ford, de la línea Topaz, de color azul, se percató que en el interior estaba el cuerpo sin vida de un hombre, bañado en sangre, y con una cobija que le cubría parte de su cuerpo, por lo que de inmediato llamó al número de emergencias 911.
Agentes de las diferentes corporaciones arribaron al lugar, donde tras con×rmar el crimen pidieron la presencia del Ministerio Público para que diera fe de los hechos; a la par, el grupo de Homicidios de la Policía Investigadora de Delitos (PID) arribó a la escena del asesinato.
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Gracias a algunas averiguaciones, practicadas en el lugar por los detectives de la PID, se logró conocer la identidad de los probables homicidas, los cuales fueron ubicados y detenidos a horas de ocurrir los hechos. Se trata de Marco Antonio “N”, de 17 años, Alejandra Berenice “N”, de 23, Gerardo “N”, de 19, y María Isabel “N”, de 50 años, quien, para sorpresa de los agentes, resultó ser hija de la víctima.
De acuerdo al informe de las autoridades, el asesinato ocurrió la noche del viernes, luego de que la hija de la víctima citó a los ya mencionados en la casa de su padre para cometer el robo de una cantidad no precisada de dinero y objetos diversos.
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Tras quitarle la vida al septuagenario, subieron el cadáver a su automóvil y lo taparon.
Allegados a la familia señalaron que el ahora occiso había cobrado un seguro por la muerte de otra de sus hijas y que por dicho cobro se había generado una discusión entre familiares políticos, siendo esta una de las hipótesis que la Fiscalía siguió hasta descubrir las razones por las que se puso haber perpetrado el asesinato. Además se dijo que la relación entre los homicidas nació por la adicción a las drogas.
