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Según fuentes allegadas a la familia, todo apunta a que en el crimen estaría involucrado el nieto de dos de las víctimas, quien anoche estaba prófugo
Saltillo.- En un caso que conmocionó a la comunidad saltillense, cuatro integrantes de una familia fueron asesinados en una casa de la colonia Latinoamericana: las víctimas son un hombre y tres mujeres, de edades entre los 60 y 91 años.
Según fuentes allegadas a la familia, todo apunta a que en el crimen estaría involucrado el nieto de dos de las víctimas, quien anoche estaba prófugo, mientras que otros dos hombres ya habían sido asegurados por las autoridades.
Alrededor de las 9:50 horas, una mujer acudió a la casa de sus padres, en el número 763 de la calle Montevideo, pues desde el fin de semana les había hecho varias llamadas telefónicas y no respondían.
Al ingresar al domicilio descubrió la escena con los cuatro cuerpos: su padre José Antonio C. M., de 71 años; su madre Hermelinda F. D., de 70 años; su abuelita María Aurelia D. F., de 91 años, así como a su tía Virginia F. D., de 60 años.
Los cadáveres se encontraban en distintos puntos de la casa. En la planta baja fueron halladas las tres mujeres: una en el baño, una acostada en la recámara y la otra en la lavandería. José Antonio estaba en la planta alta, en un cuatro habilitado como estudio.
Presentaban golpes en cuerpo y rostro, y al menos dos de ellos (los esposos) tenían lesiones que les fueron ocasionadas con algún objeto punzocortante.
Visiblemente afectada, la familiar de las víctimas salió de la casa y llamó al 911, por lo que al lugar llegó personal de Bomberos, pero las autoridades investigadoras ya no se les permitieron pasar.
Los rescatistas sólo valoraron a la mujer, quien cayó en una crisis nerviosa y gritaba que habían matado a toda su familia.
Peritos de la Fiscalía General del Estado levantaron evidencias, mientras que agentes iniciaron las investigaciones entrevistándose con los familiares que vieron con vida por última vez a las víctimas.
“Al parecer fallecieron por arma blanca. Estamos realizando las investigaciones por parte de Servicios Periciales para identificar las líneas de investigación a seguirse en el momento”, declaró sobre el caso Everardo Javier Lazo Chapa, delegado de la FGE en la Región Sureste.
En la escena del crimen se localizó un mensaje, pero sobre eso el funcionario mencionó: “podría decir que sí se descarta la participación de un grupo de la delincuencia organizada, es una cuestión que no tiene que ver nada con se tipo de situaciones”. Lazo Chapa agregó que los cuerpos tenían más de un día sin vida.
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FAMILIAR, SOSPECHOSO
De manera extraoficial, fuentes cercanas a la familia indicaron que el multihomicidio pudo haber sido cometido la tarde del sábado, y sospechan de un pariente cercano, nieto de José Antonio y Hermelinda, el cual tiene un historial de consumo de drogas, así como también de esquizofrenia.
También se dio a conocer que la víctima identificada como Virginia padecía de sus facultades mentales, y que el principal sospechoso se llevó la camioneta de la familia así como varias tarjetas bancarias.
Éstas son algunas de la tragedias familiares en Saltillo:
2009 | Marzo 24
Rocío Hernández bañó con gasolina a sus hijos Fátima, de 5 años, y a Saúl Alexander, de 11, y con el mismo combustible ella también se empapó para luego prenderse fuego y causar la muerte de los tres en un domicilio de la calle Múzquiz, en el centro de la ciudad.
2017 | Septiembre 12
José de Jesús Serna estranguló a su tía Aracely Serna Espinosa porque le arrojó la guitarra luego de que le exigió que trabajara o se fuera de la casa, ubicada en Bravo y Múzquiz, en el centro, donde el joven sepultó el cuerpo de la mujer en la recámara.
2017 | Noviembre 21
Mónica Amaya, de 25 años, mató a sus hijos Javier Roberto, de 5 años, y Carlos Francisco, de 6, por intoxicación de gas y luego se suicidó de la misma manera por una deuda de 100 mil pesos que tenía. La tragedia ocurrió en el bulevar Eulalio Gutiérrez.
2018 | Abril 30
Rodofo Peña degolló a su hijo de 9 años y después se suicidó en la calle prolongación Cipreses de la colonia Mirasierra. El hombre tenía problemas con su mujer.
Por: ULISES MARTÍNEZ Y MARCELINO DUEÑEZ
