Ecatepec, Estado de México.- Un ladrón murió calcinado luego de quedar atorado en la chimenea de un negocio al que pretendía robar, pero no contaba con que una reja le impediría el paso y quedó ahí hasta que al otro día los empleados encendieron el fuego.
Fue en la esquina de la avenida Hidalgo y Luis Echeverría, en la colonia Nueva Aragón en Ecatepec, Estado de México, donde la noche del jueves un sujeto intentó entrar a robar a un negocio de pollos rostizados, pero quedó atorado.
La mañana del viernes, los empleados acudieron de manera normal y comenzaron sus labores, por lo cual encendieron las máquinas y la chimenea comenzó a arder, calcinando al ladrón.
Fue más tarde que los trabajadores detectaron un olor inusual, por lo que al revisar la chimenea encontraron el cadáver del sujeto, de aproximadamente 30 años de edad, por lo que dieron aviso a las autoridades, acudiendo al lugar Policías municipales y paramédicos, quienes confirmaron el horrible deceso.
Personal del Semefo, así como ministerial, acudieron posteriormente a tomar conocimiento de los hechos y ordenar el traslado del cuerpo en calidad de desconocido sus instalaciones para iniciar las averiguaciones correspondientes.