Ecatepec, Estado de México.- “Me siento muy mal porque cuando yo supe que ya lo iban a detener pensé que iba abrazar a mi hija, nunca pensé que la iba a encontrar así. Ahorita nos las entregan, pero es horrible, nos destrozan”, expresa María Guadalupe Hernández, mamá de Arlet Samanta Olguín Hernández quien desapareció el 25 de abril de 2018.
Tras nueve meses sin saber qué le había pasado a su hija, María Guadalupe sabe hoy cómo fue privada de la vida a manos de Juan Carlos “N”, ‘El Monstruo’, y Patricia “N”, la esposa de éste.
A Arlet Samanta la citaron en su departamento, situado en la parte de arriba de su vivienda, en el fraccionamiento Jardines de Morelos Sección Playas, para supuestamente venderle un pantalón.
Ahora se sabe que Juan Carlos la mató en el sillón cuando Arlet, de 22 años, trataba de pedir auxilio.
Después fue cortada en pedazos en el interior del baño y Patricia preparó su carne en tamales, pues a Juan Carlos les gusta la carne humana desde que tenía 22 años, fecha en que empezó a matar.
Posteriormente, los feminicidas vendieron los huesos a un santero llamado ‘el bones’; mientras que los restos los metió en bolsas y las arrojó a un terreno baldío.
Ahora, en la audiencia inicial de formulación de imputación, la pareja de homicidas solicitó una prórroga de 144 horas para vinculación a proceso. Durante la audiencia estuvieron presentes las madres de Nancy, Evelyn y Arlet, las tres víctimas por las que hasta el momento la pareja enfrenta proceso.
Los restos de las tres mujeres serán entregados el sábado para que sus familiares le den cristiana sepultura. Ahora solo piden se agilicen los procesos.
“Esperemos que ya acabe esto, que ya no se alargue tanto. Aunque estos se queden de por vida jamás van a pagar todo el daño que han hecho a muchas familias”, puntualizó María Guadalupe.