Kaze
Saltillo.- A las 9:33 de la noche del miércoles, Roberto Nájera posteó en su cuenta de “Face” la frase: “aquí casual a punto de morir…”, mostrando una foto con al menos ocho shots de tequila.
En ese momento el chavo de 28 años bromeaba aludiendo a la cantidad de tequila que beberían; sin embargo, una hora y media después, él y sus amigos, quienes viajaban en un Nissan March, chocaron contra un edificio en construcción ubicado en el bulevar José Musa de León, el resultado fue trágico: tres fallecieron y sólo una joven sobrevivió al impacto pero está grave.
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Del gozo al pozo…
Lo que debió ser una noche de diversión entre amigos terminó en tragedia. El alcohol y la imprudencia al manejar habrían causado el percance.
Ese día, César Zaid Álvarez publicó en Facebook una visita en el bar La Bolera, en el bulevar Venustiano Carranza, indicando a las 6:47 de la tarde que ya estaba con Alin Elizalde.
Posteriormente Roberto publicó en su perfil que se encontraba en el bar Sayu Sayulita, en V. Carranza y Michoacán, con el atemorizante mensaje que, a la postre, se haría realidad.
Se presume que los cuatro amigos, ya con ellos Iveth Anáhuac Alvarado, viajaban en el Nissan March a otro bar del bulevar Moctezuma, pero Alin, quien viajaba en presunto estado de ebriedad, perdió el control al ir desplazándose a más de 120 kilómetros por hora sobre el bulevar Musa de León, donde la máxima velocidad permitida es de 50.
Alin era trabajadora de AT&T; Roberto era dueño de un negocio de reparación y venta de celulares llamado Mobile Fix, mientras que César e Iveth fueron identificados como estudiantes de Comunicación.
La entrega de los cuerpos se retrasó por cuestiones que la Fiscalía no dio a conocer, pues las necropsias de Alin, César y Roberto se realizaron desde las 7:00, 8:00 y 9:00 de la mañana, respectivamente.
Por Jetza Muzquiz
