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Georgia, Estados Unidos.- A tan solo un mes de la terrible tragedia de Longanville, en Georgia, donde Isabel Martínez, una madre mexicana de 33 años, fue acusada de asesinar a puñaladas a sus cuatro hijos y a su marido, el lunes pasado otra madre hispana se convirtió en noticia tras ser acusada de la muerte de su pequeño de 3 años.
Se trata de Jamie Lee Camacho, de 24, que el pasado 28 de julio llamó a la policía local para reportar que su hijo se había perdido de su residencia, ubicada en el condado de Tattnall, Georgia.
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De inmediato, los oficiales del Sheriff respondieron a la llamada de emergencia, pero lo que encontraron los sorprendió.
El pequeño hijo de la mujer, identificado como Jakob Camacho, estaba encerrado dentro de un carro en la vivienda, sin signos vitales.
Los paramédicos llegaron e intentaron revivirlo, pero fue imposible: el niño fue declarado muerto en el sitio, según información del Buró de Investigaciones de Georgia (GBI).
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Jamie Lee Camacho ahora enfrenta cargos por crueldad infantil en segundo grado y homicidio doloso.
Las causas por las que murió el niño continúan sin ser esclarecidas. El FBI continúa las investigaciones de este caso.
La madre permanece tras las rejas en una cárcel local.
Este sería el segundo caso en menos de mes y medio donde una madre hispana es la sospechosa de la muerte de su hijo en Georgia.
