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Ciudad de México.- La mañana del pasado lunes una mujer abordó un Uber para trasladarse al municipio de Tepoztlán. Cuando llegó, se dirigió a un hotel y alquiló una habitación, todo lo anterior conforme al plan que tenía con dos personas más para fingir su secuestro.
Previamente, ella le dijo a sus padres que se dirigía a la Ciudad de México, así que sus cómplices llamaron vía telefónica a sus padres para decirle que la tenían secuestrada.
Hasta ese momento todo funcionaba conforme a lo previsto, aunque los supuestos secuestradores no pidieron ninguna cantidad de dinero por la liberación de la joven.
Mientras sus papás acudieron a levantar una denuncia de inmediato ante la Unidad Especializada en Combate al Secuestro y la Extorsión (UECS), instancia que descubrió la falsedad del plagio.
“Las investigaciones que hicimos nos permitieron ubicarla al otro día en un hotel de Tepoztlán y con elementos de prueba nos percatamos de todo lo sucedido, incluso se habló de que el chofer del Uber estaba implicado, pero nos percatamos que no era así”, dijo la fiscal Antisecuestros, Adriana Pineda.
Mencionó que tras descubrir el falso secuestro se detuvo a la joven junto con sus complices quienes fueron llevados a juicio, ya que la ley contempla que quien simule su secuestro, como víctima, puede alcanzar una pena de hasta 200 días de trabajo comunitario.
Mientras que para los que colaboren en un engaño así, la pena es de hasta seis años de prisión. En lo que va de 2018 suman tres casos como éste, mientras que en 2017 se reportaron 11.
